Todas las cremas de verduras pueden prepararse sin nata, pero añadiendo este ingrediente le daremos un irresistible toque cremoso y le aportaremos un extra de sabor. La crema de calabaza es una receta sencilla y perfecta para aprovechar productos de temporada y proximidad como pueden ser las calabazas en otoño. Incluso si no eres fan de la calabaza, dale una oportunidad. ¡Te sorprenderá!
Alérgenos
Lactosa
¿Qué productos de Larsa necesitas para hacer la receta?
El primer paso de esta receta es lavar, pelar y trocear nuestra calabaza, una tarea que hay que hacer con cuidado porque las calabazas son duras de pelar 😉
A continuación, pelamos y troceamos las patatas, el ajo y la cebolla.
En una cazuela, ponemos a hervir agua y vertemos dentro todos los ingredientes.
Dejamos que se cuezan durante 30 minutos.
Cuando todas las verduras estén bien cocidas, las echamos (incluyendo el agua) en el vaso de la batidora o en un bol amplio y los batimos hasta conseguir un puré espeso.
A continuación, devolvemos la crema a la cazuela y la ponemos a fuego lento y añadimos la Nata para cocinar Larsa.
Espolvoreamos con una pizca de sal y otra de pimienta.
Dejamos cocinar unos minutos hasta que esté bien caliente mientras removemos bien para que no se pegue.
¡Y listo! Ya podemos emplatar nuestra crema de calabaza.
Para darle un toque extra de sabor, podemos añadir un chorrito de aceite de oliva virgen extra. ¡Verás qué rica queda la crema!
