La mantequilla es un alimento clave en la gastronomía del norte de Europa desde hace siglos. ¿El motivo? Estas zonas son conocidas por su gran producción láctea, de manera que podían elaborar mantequilla casera a partir de la nata de la leche de vaca de forma sencilla.
Atendiendo a la definición de la Real Academia Española, la mantequilla es un producto obtenido de la leche o de la crema por agitación o batimiento. Para obtener mantequilla, por lo tanto, es necesario someter la leche a procedimientos mecánicos para batir la leche y separar la nata de la leche entera.
Este producto lácteo es imprescindible en la cocina, bien sea en una receta dulce o salada, y, sobre todo, es el complemento ideal de un buen desayuno. Pero más allá de su sabor, cremosidad y versatilidad, ¿sabrías enumerar beneficios de la mantequilla?
En este post de Larsa descubrirás cualidades y beneficios de consumir nuestra mantequilla tradicional que seguramente desconocías. ¡Sigue leyendo!
1. Rica en vitaminas
Uno de los principales beneficios de la Mantequilla Tradicional de Larsa es su alto contenido en vitaminas liposolubles. Esto se debe a que la mantequilla está elaborada a partir de grasa láctea en un porcentaje de entre el 80-90%.
Las vitaminas liposolubles son las que se disuelven en la grasa y se almacenan en el cuerpo, concretamente en el hígado, el tejido graso o los músculos. La mantequilla es fuente de vitamina A y contiene vitamina D, así como vitamina E. La vitamina A es fundamental para la salud ocular, el fortalecimiento del sistema inmunológico y para lucir una piel sana y la vitamina D que juega un papel fundamental en la absorción del calcio y en el mantenimiento de la salud ósea
2. Fuente de energía
Gracias a su contenido en materia grasa a mantequilla de Larsa es una excelente fuente de energía.
3. Fuente natural de antioxidantes
La mantequilla también contiene vitamina E que contribuye a la protección de las células frente al daño oxidativo.
4. La mantequilla, tu aliada en la cocina
La Mantequilla Tradicional de Larsa es el complemento ideal que no debe faltar en tu cocina, ya que forma parte de los momentos más especiales que compartes con tu familia. ¿Quién no disfruta de un desayuno con tostadas recién hechas con mantequilla con el sabor tradicional de siempre que aporta cremosidad y un gusto delicioso? ¡Es la mejor forma de comenzar el día y, además, a los más pequeños de la casa les encanta!
Pero la mantequilla no es solo para los desayunos. Su versatilidad la convierte en el ingrediente estrella para cualquier plato. Desde recetas saladas como salsas o gratinados, hasta postres como bizcochos o tartas, la mantequilla aporta ese toque inconfundible. Incluso para dorar unas verduras al horno o para preparar una crema suave, la mantequilla marca la diferencia añadiendo un extra de cremosidad.
Si no eres un experto en la cocina, no te preocupes, la mantequilla es tu mejor amiga para convertir un plato sencillo en un manjar delicioso. ¿Cómo? Añade a un plato de pasta un poco de mantequilla derretida, por ejemplo, o agrega una pequeña nuez de mantequilla a unas patatas asadas para aportar un toque cremoso. ¡Confía en nuestra mantequilla tradicional para transformar tus recetas y convertirte en un chef espectacular!
Ahora que conoces todo lo que puede ofrecerte nuestra Mantequilla Tradicional, ¿a qué esperas para convertirla en un alimento básico en tu cocina? ¡Descubre los múltiples usos que le damos nosotros a la mantequilla en nuestra sección de recetas! Ya sabes…#AquíFacémoloAsí 😉