En un bol y con ayuda de unas varillas batimos los huevos, los yogures y el queso crema. El queso mejor tenerlo un rato fuera de la nevera para que se integre mejor.
Con ayuda de un colador integraremos la harina y la levadura poco a poco sobre la mezcla anterior hasta conseguir una mezcla suave y homogénea.
Si se hace muy pesado el batido a mano podemos usar la batidora eléctrica pero sin abusar para que no quede con una consistencia muy líquida.
Pasaremos la mezcla a un molde engrasado ligeramente con mantequilla o con spray de hornear y dejamos cocinar a 180 grados durante 35 o 40 minutos.
Pasado este tiempo probaremos pinchando con un cuchillo, si sale seco estará en su punto si no horneamos 5 o 10 minutos más.
Dejaremos enfriar y la podemos servir con helado de vainilla, con caramelo o sola porque está deliciosa.